Despedimos con todo cariño a Olivio, que vuelve a Guinea Bissau curado de su cardiopatía tras ser operado en Zaragoza.

Agradecemos, como siempre, a la cadena de buena gente que lo ha hecho posible: la Consejería de Sanidad de gobiernodearagon, por autorizar la operación en el hospital Miguel Servet; Pilar y familia, por su apadrinamiento; la Federación Acisjf-In Via que los acoge; a nuestra querida AIDA, Ayuda, Intercambio y Desarrollo, por preocuparse siempre de los niños enfermos de aquel país; y por supuesto, a los voluntarios de IS en Zaragoza.

Buena vida, querido amigo.