Abubakar fue intervenido en 2010 de la cardiopatía que padece, en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid.

Le recibimos de nuevo, con ilusión, junto a su madre, porque necesita una nueva operación que no se puede realizar en su país, Kenia.

Agradecidos a Fundación Pablo Horstmann por cuidar tan bien de los niños en Lamu; a María, Diego e hijos, por abrirles las puertas de su hogar con tanto cariño; al Ayuntamiento de Lucena (convocatoria de subvenciones Cooperación Internacional-2022), por el apadrinamiento de sus vuelos; y a los profesionales del Hospital Ramón y Cajal, siempre tan humanos y dispuestos a ayudar.

Un privielgio de cadena de gente buena.

Bienvenido amigo, pronto curado del todo.