Recibimos ilusionados a Aurelio, que llega desde Guinea Ecuatorial para realizarse la cirugía traqueal que necesita y es imposible realizar en su país.

Agradecemos, con admiración, a la doctora Soria Moya el cuidado del pequeño desde su nacimiento, su vínculo emocional con él y todo el trabajo realizado en GE para poder traerle. Ha sido difícil y a veces muy frustrante, Ana, pero ya le tenemos aquí.

Agradecidos, de corazón, una vez más, al Fondo de Cooperación de la Junta de Andalucía, por darnos la oportunidad de operar a estos niños, sin otra posibilidad, en los hospitales públicos andaluces. Y al equipo del Dr Matute, del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, por aceptar un caso tan complejo.

Igualemente agradecidos con África y Rafael, por abrir al niño, y a su madre Anabel, las puertas de su hogar.

Y no nos podemos olvidar de los voluntarios de IS en Sevilla, siempre ilusionados y entregados a estos pequeños.

Como siempre decimos, un privilegio formar parte de esta cadena de gente buena.

Bienvenido Aurelio, pronto curado.